Croacia. Director: Branko Schmidt. 2017.
Miran es un sacerdote en una parroquia de los suburbios de Zagreb y también prepara a los chicos del instituto local con su catequésis, para los que siempre intenta ser un modelo ejemplar.
Miran conduce una moto, juega con los chicos a básquet con ellos, bebe cerveza y también juega a videojuegos.
Goran, un chico huérfano, es el favorito de Miran, algo que no pasa desapercibido entre el resto del grupo, en especial para Gabriel, un tercero en disputa que luchará por su afecto.
Estamos anta una película realizada en Croacia, por el director Branko Schmidt que se estrenará en las próximas semanas en los cines.
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